“La primera huelga de bomberos a la japonesa” corean los titulares de la prensa mientras los bomberos nos enseñan una forma “práctica” y “no dolorosa” de manifestarse por algo necesario.
Los servicios mínimos se han cumplido al 100% (tomad nota para una futura huelga de metro) y los bomberos a esto responden que ellos trabajan por nosotros... ¡Que grandiosa lección están dando los bomberos!
En cambio, ¿qué ocurre si una “pandilla” de controladores aéreos se ponen en huelga? Que Zapatero coge y sí que se pone las pilas porque cuando nadie puede viajar, es un problema nacional. Pero cuando los que no pueden viajar son los ciudadanos madrileños, esos que se carguen con el peso de la huelga por votar al PP ¿No?
He aquí un gran ejemplo de un gran presidente: paga dinero para evitar los problemas en lugar de zanjarlos de raíz. Esto es algo que se le da muy bien: huir de los problemas.
¿Que hay paro? ¡No pasa nada! Aumentamos la edad de jubilación para que los que estén trabajando no haya que pagarles nada hasta dentro de unos años (y el marrón que se lo coman otros).
¿Que hay una huelga general? ¡Tranquilos! Zapatero saca dinero de la nada (“Si eliminamos las ayudas a los parados, que son muchos, me ahorraré algo de dinero para mis caprichos”) y les paga 27 milloncejos...
¿Que la gente está viviendo en la miseria? ¡No se preocupen! Que llamamos a Merkel y nos vamos a trabajar a Alemania (“total, los que se vayan sé que no me van a votar”).
Sinceramente Zapatero: huir hasta de las preguntas es lo más bajo que se puede hacer y no estoy dispuesto a seguir permitiéndolo (pero que remedio, parece ser que no quieres dimitir...). Eso sí, en lugar de hablar de cómo mejorar el país (que ya de por sí es irónico que ese desgobierno pueda ayudar a un país ya destrozado) prefieren “charlar” de quién será el sucesor de ZParo...
J.L.M.
